Acompañamiento espiritual
Según la OMS, la dimensión espiritual “se refiere a aquellos aspectos de la vida humana que tienen que ver con experiencias que trascienden los fenómenos sensoriales. No es lo mismo que religioso, aunque para muchos la dimensión espiritual incluye un componente religioso; se percibe vinculado con el significado y el propósito y, al final de la vida con la necesidad de perdón, reconciliación o afirmación de los valores”.
Las necesidades espirituales, según estudios realizados por diversos autores, (Javier Barbero, E.J. Cassell, Ramón Bayés, Harvey Max Chochinov, etc) son:
- necesidad de ser reconocido como persona
- necesidad de resignificar la propia vida
- necesidad de encontrar un sentido a la experiencia vital
- necesidad de perdonarse a sí mismo
- necesidad de sentirse perdonado y de perdonar
- necesidad de trascendencia
- necesidad de esperanza
- necesidad de expresar sentimientos y vivencias religiosos
- necesidad de amar y ser amado
"El acompañante espiritual debe ser una persona que sepa escuchar y no tenga prejuicios, capaz de tratar cuestiones relacionadas con el significado de la vida. Esas cuestiones les surgen invariablemente a los pacientes y sus familias. El papel del acompañante espiritual es a menudo el de escuchar, propiciar y facilitar el recuerdo del pasado y preparar para lo que está por venir. Los acompañantes espirituales también sirven a menudo de confidentes y punto de apoyo para personas con tradición religiosa, organizando ritos religiosos que tengan un significado para ellas" OMS 2005.
Nuestros acompañantes espirituales ayudan a las personas enfermas a reflexionar sobre sus necesidades espirituales con el objeto de satisfacerlas, para así encontrar la paz interior.